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Estudiantes latinos asisten en su primer día de clases a la escuela All Boys STEM Leadership Academy en el Sur Los Ángeles (Aurelia Ventura/ La Opinion)

Por Jacqueline García, La Opinión

No hay faldas, ni trenzas, ni discusiones sobre peinados y moda.

Lo que sí hay son chicos, de hecho es todo lo que encuentras en la primera escuela para varones Boys Academic Leadership Academy (BALA) del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles que abrió sus puertas el martes sirviendo a estudiantes del sexto y séptimo grado.

Alex Figueroa, de 13 años, es uno de los estudiantes que comienza el sexto grado y dijo que esta contento de asistir a este plantel.

“Aquí voy a poder hacer más amigos porque en la primaria no tenía tantos”, dijo Alex, quien espera aprender acerca de ingeniería y arte en sus clases.

Antwone Usher, de 11 años, dijo que estaba emocionado de asistir a este plantel puesto que en las escuelas de niños y niñas hay “mucho drama”.

“Ellas son las que llegan tarde a las clases y así mejor nos enfocamos en nosotros mismos”, dijo el pequeño, quien también comienza el sexto grado.

La escuela tiene un enfoque de aprendizaje estricto y riguroso que servirá para su futuro. Sus cursos incluirán los temas de ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas (STEAM).

Para el maestro Miguel Sánchez—uno de los cinco educadores que comienzan en la nueva escuela—esta es una verdadera aventura.

“El objetivo es combatir eso y enseñarles acerca de los modelos a seguir”, dijo el maestro.

El director Donald Moorer dijo que como cualquier escuela nueva, él entiende que la inscripción es baja inicialmente debido al temor de los padres por un cambio.

“Pero esperamos poder rebasar los 150 estudiantes para este año escolar pronto”, dijo el director. Actualmente hay cerca de 100 alumnos en el plantel.

La academia es una versión similar a las escuelas públicas de un solo género en vecindarios peligrosos de Nueva York que han resultado exitosas.

“Si sabemos que lo hicieron y funcionó en el Bronx, en Brooklyn y en Queens, sabemos que lo podemos hacer en el sur de Los Ángeles”, dijo Moorer con positivismo.

En medio de una ceremonia de limpieza espiritual, estudiantes de la nueva escuela en el sur de Los Ángeles dieron gracias en su primer día de clases mientras vertían agua en un arbolito.

“Yo doy gracias porque mi mamá me inscribió en esta escuela”, dijo uno de los estudiantes.

“Yo doy gracias por mis maestros y mi director”, dijo otro.

“Los estudiantes vierten agua en este árbol de limón, que crecerá en seis años cuando todos ellos estén listos para irse a la universidad”, dijo emocionado el director Donald Moorer anunciando el árbol como símbolo de un nuevo comienzo.

Las clases comenzarán diariamente con una reunión en el patio donde Moorer ofrecerá un mensaje positivo para el día y todos los estudiantes dan gracias por algo. Luego se leerá el poema “Invictus” de William Ernest Henley.

El campus escolar comparte espacio con la secundaria Washington Preparatory y aunque por el momento la mayoría de sus estudiantes son de origen afroamericano, todos son bienvenidos.

“Tenemos latinos y hasta tenemos un anglosajón”, dijo Moorer.

Este artículo esta publicado en La Opinión.