El empoderamiento de los jóvenes y el logro de justicia educativa: The 74 entrevista a Alexis Morin sobre los Estudiantes por la Reforma Educativa
Kate Stringer | August 29, 2017
Your donation will help us produce journalism like this. Please give today.
Hace cuatro años, un grupo de estudiantes universitarios de Los Ángeles se reunió en una cafetería para compartir historias. Algunas de ellas eran difíciles de escuchar: lo que se sentía tomar clases remediales de recuperación, el que un profesor te hable como si no supieras nada, el ser la primera persona en el barrio o en la familia que asiste a la universidad.
Pero otra cosa estaba sucediendo en esa habitación: los estudiantes se daban cuenta de que no estaban solos. El sistema educativo en el que habían pasado las últimas dos décadas no funcionaba para ellos ni para sus compañeros que compartían entornos socioeconómicos. Sin embargo, tenían esperanza en el sistema. Y tenían esperanza de que podrían cambiarlo.
Todos estos estudiantes pertenecían a Students for Education Reform (Estudiantes a favor de una Reforma Educativa), o SFER, una red sin fines de lucro de 2,000 estudiantes en 93 campus universitarios que capacita a jóvenes activistas de la educación. Alexis Morin, directora ejecutiva y co-fundadora de la SFER, escuchó estas conversaciones ese día, y aunque creó la SFER en 2011, ella acredita ese momento en la cafetería como un punto crucial en su comprensión de la importancia de la voz de los estudiantes en la educación.
“Estaba más que emocionada por lo que un grupo de personas que comprenden lo que merecen de este sistema —y no están recibiendo—podría hacer para moldear el sistema”, dijo.
Morin, que ahora tiene 27 años, ha incrementado su equipo de personal de SFER a 23, el cual supervisa la organización de estudiantes en seis ciudades: Los Ángeles, Denver, Boston, Minneapolis-St. Paul, Charlotte y Richmond, California. Los 4,000 estudiantes que han formado parte de la SFER a lo largo de los años —más del 60 por ciento de estos estudiantes que se identifican como de bajos ingresos, primera generación que asiste a la universidad / o estudiantes de color—han influenciado candidaturas para la Junta Escolar, lucharon contra las rigurosas prácticas de la policía escolar, denunciaron redadas a familias de inmigrantes, y abogaron por la contratación de maestros de alta calidad.
Morin habló con The 74 sobre la falta de voz y poder de los estudiantes en las escuelas, y por qué los estudiantes deben exigirlo.
Esta entrevista ha sido editada por longitud y claridad.
¿Cuándo fue que decidiste iniciar SFER? ¿Qué fue lo que te inspiró?
Me conecté con Catharine (Bellinger), mi co-fundadora, al final de nuestro primer año –freshman y ambas teníamos el deseo de pasar parte de nuestro tiempo en (Princeton) haciendo algo que consideramos significativo. Mi co-fundadora había hecho una pasantía de enseñanza intensiva en KIPP en Washington D.C. Yo había servido en la junta escolar en mi ciudad natal en Massachusetts (durante la preparatoria). Que fue una gran experiencia. Aprendí que el Education Reform Act (Ley de la Reforma Educativa) de 1993 en Massachusetts establece que cada distrito de Massachusetts debe tener un representante estudiantil en la junta escolar. Pero eso a menudo se cae en el camino. Mi distrito generalmente ofrecía material académico de alta calidad. Había toneladas de cursos fenomenales y maestros, y aun así había estudiantes que no estaban siendo bien atendidos y había una gran disparidad en la calidad de los maestros en toda la escuela. Pensé que todo aquello era realmente interesante.
¿Te percataste de ello en las reuniones de la junta escolar?
Me di cuenta de ello por ser una estudiante realmente comprometida y también por ser el editor en jefe de mi periódico escolar. Mi meta en la junta de la escuela fue plantear algunas de estas preguntas y hablar sobre lo que sería tener maestros que estuvieran al nivel de nuestros maestros estrella—estilo estrella de rock—en todas las clases.
Había otra cosa que yo no podía mencionar en ese entonces, pero que creo que faltaba en mi ciudad natal – un profundo compromiso de desarrollar el sentido de propósito y carácter de los estudiantes y el tener un sentido de su papel como ciudadanos. La escuela en su conjunto no tenía una misión entorno a los estudiantes de encontrar o buscar su lugar en el país, en el mundo, y el pensar en cómo combinar sus dones con la búsqueda de justicia.
Comencé a comprender la diferencia entre la voz del estudiante y el poder del estudiante. Creo que ambos son importantes, pero el miembro del consejo escolar estudiantil, por ejemplo, es una posición sin derecho a voto. Esa es una de las ideas que han cobrado vida en nuestro trabajo de organización estudiantil: Creemos absolutamente que necesitamos construir una plataforma para gran parte de nuestra voz estudiantil. La gente y quienes están a cargo de tomar decisiones necesitan entender cuáles son los sueños de los estudiantes y si su experiencia los está impulsando hacia esos sueños. Los estudiantes necesitan poder. El poder es la capacidad de empujar a alguien a tomar una decisión que le beneficiará en la búsqueda de sus sueños. A través de nosotros, los estudiantes están construyendo ese poder a través de la acción colectiva, la organización de la comunidad, las campañas sobre un tema, y estas campañas electorales. Cuando podemos combinar esas dos cosas, veremos que los distritos son mucho más receptivos a las necesidades de los estudiantes y de la comunidad.
¿Qué piensas sobre el desempeño de las escuelas o los distritos cuando se trata de darle poder a los estudiantes versus darles voz?
La voz del estudiante no se escucha y hay muy poco poder estudiantil. “El poder no concede nada sin una demanda. Nunca lo hizo y nunca lo hará”, —la cita de Frederick Douglass. Estas instituciones y quienes las dirigen—en particular cuando el desempeño es insuficiente y no es un ambiente que apoye a los estudiantes— nunca van a darle poder a los estudiantes o, en mi opinión, ni siquiera estarán particularmente interesados en escuchar las voces de los estudiantes. Pero los estudiantes juntos pueden organizarse y reclamar el poder y exigir que se reconozcan sus demandas.
Tenemos increíbles ejemplos inspiradores de esto en la historia de nuestra nación. Probablemente el ejemplo que más nos ha inspirado en SFER ha sido el trabajo del Student Nonviolent Coordinating Committee (Comité de Coordinación Estudiantil No Violento) durante el movimiento por los derechos civiles y el trabajo que hicieron los estudiantes universitarios y los jóvenes para registrar a los votantes, desafiar las políticas racistas y agitar a la gente para ponerse en contacto con su propia dignidad … los sacrificios y riesgos que esos jóvenes estaban dispuestos a tomar cambiaron para siempre nuestra nación.
Mucho más recientemente, hemos visto una oleada de protestas de Black Lives Matter (Vidas Negras Importan) a menudo dirigidas por jóvenes y la expresión del campus de eso, donde los estudiantes Negros se organizan, exigiendo que sus necesidades y sus experiencias sean reconocidas en el campus, realizando sit-ins (forma de acción directa no-violenta que involucra a una o más personas que ocupan un área para una protesta, a menudo para promover el cambio político, social o económico) y amenazando con tener una huelga del equipo de fútbol. Creo que el movimiento DREAMer es otro movimiento que ha inspirado a la nación y cambió completamente la empatía con la que los Estadounidenses comprenden las experiencias de los inmigrantes y los niños inmigrantes y los niños indocumentados.
Esta pregunta de “¿Qué tanto están haciendo nuestras escuelas para dar a los estudiantes voz y poder?” es casi siempre –que nada. Esa no es su función. Pero ¿qué tan bien están los estudiantes trabajando para organizarse, crear su propia agenda y construir el poder para exigir eso? Creo que hemos visto ejemplos de eso históricamente, y ahora vemos ejemplos de estudiantes que están haciendo eso cuando se trata de esta cuestión de una educación de calidad.
¿Cuáles son algunos de los mayores logros de la SFER?
Construir este movimiento de estudiantes. A la fecha hemos tenido a más de 4,000 miembros en SFER acumulativamente que representan diversidad y son reflejo de los estudiantes que pasan por nuestro sistema escolar. Eso significa que hay estudiantes universitarios de primera generación, hay estudiantes inmigrantes, hay estudiantes indocumentados, hay estudiantes de color, y todos estos estudiantes han sido entrenados en defensa y organización. Aquellos que son estudiantes universitarios están tomando acciones, y los que son egresados, el 60 por ciento está trabajando en la educación o defensa.
El siguiente logro del que estamos tan orgullosos es el trabajo que los miembros de la SFER Action Network (Red de Acción de SFER) han realizado para reformar sus juntas escolares de la ciudad. Desde 2013, a través de cinco diferentes distritos escolares de la ciudad, los jóvenes alumnos graduados—alumni de esos distritos han participado activamente en la evaluación de candidatos para el consejo escolar, apoyando a las personas que consideran que van a luchar por la educación de estudiantes de bajos ingresos y luego educando a los votantes sobre el poder de un voto para la junta escolar. Esas campañas han dado lugar a un aumento del 8 por ciento en la participación electoral cuando nuestros miembros llegan a hablar con la gente a sus puertas. La gente que se presenta son familias que están siendo desatendidas por el distrito y suelen no votar en las elecciones de la junta escolar. Ahora estos barrios y votantes están diciendo: “Wow, tengo poder para empujar al distrito para que haga los cambios significativos que mi familia necesita”.
Cuando los estudiantes han desempeñado un papel en ayudar a dar forma a aquella (junta escolar), los miembros de la junta saben que hay jóvenes alumni de su distrito que los están observando. A los miembros de la junta escolar les interesa lo que este grupo piensa de ellos, y quieren a menudo, aprender de los estudiantes.
Como por ejemplo, una de nuestras miembros, Brenda Contreras, quien es una estudiante universitaria de primera generación en la Universidad Estatal de Sacramento, navegó su camino a la universidad mediante un programa extra-escolar y el asesoramiento de sus amigos. Mientras que ella tuvo algunos profesores en su recorrido a través de las escuelas públicas de Richmond que la apoyaron, ella no tuvo un profesor que la ayudara a pensar en hacer una solicitud para la universidad. Un llamamiento para la acción realmente poderoso que Brenda tiene para el distrito es para desarrollar el apoyo para ir a la universidad como parte del programa académico.
¿Cuáles son algunas de las cuestiones que estás defendiendo?
Nuestros miembros han abordado temas que representan sus experiencias en el sistema escolar: la lucha por la dignidad, la seguridad, el respeto y los derechos civiles. Otras cuestiones representan su reclamo por tener acceso a la educación. Sé que suena tan simple, pero el hecho es que en demasiados lugares no está sucediendo. Te daré algunos ejemplos de diferentes tipos de campañas.
El año pasado, en Carolina del Norte, ICE, la agencia de inmigración, estaba realizando redadas con la intención de detener y deportar a estudiantes, incluyendo jóvenes refugiados de Centroamérica. ICE estaba haciendo estas redadas en paradas de autobús en donde la Agencia sabía que estudiantes y padres estarían allí. Estas redadas fueron aterradoras para la comunidad de inmigrantes en Carolina del Norte y en Charlotte y llevaron a la baja la asistencia ya que las familias no querían ponerse en riesgo de separación y se vieron obligados a elegir entre la asistencia de su hijo a la escuela y educarse o arriesgar su seguridad y su posibilidad de vivir en el país. Los miembros de la SFER en Charlotte asistieron a las reuniones del consejo escolar y dijeron: “Este distrito necesita defender a todos los estudiantes sin importar su estatus de inmigración o documentación”, y pidió a los miembros de la junta escolar que firmaran en apoyo a todos los estudiantes incluyendo estudiantes indocumentados, y pedir a ICE que abandonara esta táctica. Este activismo y las acciones de ICE y la reacción de la comunidad fue incluso recogido por el New York Times editorial board (consejo editorial del New York Times). Había un estudiante que nuestros miembros estaban apoyando en particular, y pudieron detener su proceso de deportación en gran parte porque la comunidad alzó su voz y dijo, “Absolutamente no. Es un estudiante y debería estar en la escuela y debería estar aprendiendo”.
Una cuestión similar, relacionada que nuestros miembros han retomado en Minnesota ha sido una campaña para definir y limitar el papel de los funcionarios del orden de la escuela (school resource officers). Nuestros miembros en Minnesota, muchos de los cuales llegaron a conocer a Philando Castile y han visto a su propia ciudad sacudida por las prácticas racistas de la policía, dijeron: “¿Cuál es el papel de la policía en nuestras escuelas?” No hay ninguna guía legislativa alrededor de esto y tampoco hay un enfoque de reflexión. Pero lo que estamos viendo es una vigilancia policial más fuerte en escuelas que sirven a estudiantes Negros, en escuelas que sirven a estudiantes de Color, y escuelas que sirven a estudiantes de bajos ingresos. Nuestros miembros han estado conduciendo una campaña pidiendo al gobernador y a la legislatura la creación de un grupo de trabajo y que se evalúe cuál es el rol que la policía debe desempeñar en las escuelas y cómo deben ser entrenados esos policías y cómo podemos asegurarnos como comunidad de que no estamos exponiendo a los estudiantes a desarrollar trauma sobre la vigilancia policial, la criminalización o el peligro.
Cuando se trata de estudiantes que buscan maestros que los preparen para sus estudios universitarios, hemos tenido estudiantes en Richmond, California, que piden a su superintendente y a su distrito y a su junta escolar que llenen todas las vacantes de maestros. Los estudiantes de preparatoria en la Ciudad de Richmond acudieron a una reunión del Consejo y dijeron: “Necesitamos instructores para que podamos aprender este contenido y hacer una solicitud para a la universidad”. Los estudiantes han estado testificando en las reuniones de la Junta Escolar, reuniéndose con el liderazgo del HR (Recursos Humanos) en el distrito, y hablando con expertos en políticas que comprendan los retos de las vacantes a largo plazo, la escasez de maestros y el problema que representan las credenciales de emergencia que permiten la enseñanza a maestros que no son expertos en una materia.
¿Cómo decides en qué ciudades trabajar?
Cuando estábamos creciendo de campus a campus, estábamos continuamente detectando a otros estudiantes que estaban radicalmente optimistas sobre la idea que nuestras escuelas públicas pudieran ser mucho mejores. Terminamos eligiendo muchas ciudades que habían elegido consejos escolares, y la razón de eso era que nuestra organización hermana sin fines de lucro, SFER Action Network, permite a nuestros miembros vetar candidatos que corren para ser miembros de las juntas escolares en sus ciudades y decidir qué candidatos representarán mejor sus intereses y que promoverán el mejor avance para la reforma de la educación. Cuando nuestros estudiantes realizan algún endoso, lo cual ahora ocurre cada año desde 2013, la forma en que se hacen visibles para los candidatos en los que creen es a través del contacto con los votantes, tocando puertas y llamadas telefónicas. Se trata abrumadoramente de estudiantes que lo hacen en sus propias ciudades, a veces hasta en su propio vecindario donde están hablando con los votantes. Y el impacto que han sido capaces de lograr en el aumento de la participación de los votantes, a la vez que desempeñan un papel crítico en la elección de estos candidatos, ha sido una manera realmente poderosa de apoyar a mejores líderes en nuestras ciudades. Eso es posible en las ciudades que tienen un consejo escolar que ha sido electo.
¿Cómo deciden qué camino tomar si los miembros del grupo no están de acuerdo en qué lado de un asunto deben defender?
Los estudiantes investigan lo que está pasando en su distrito… ¿Cómo funciona el poder en este distrito? ¿Quién está a cargo? ¿Quiénes ocupan un cargo en la junta escolar y cuáles son sus metas? ¿Qué responsabilidad tiene el superintendente? ¿Qué se puede cambiar y qué no? Nuestros miembros y personal están aprendiendo las respuestas a esas cosas estableciendo reuniones con funcionarios electos, asistiendo y estudiando lo que sucede en cada reunión de la junta escolar, y reuniéndose con grupos que son expertos en políticas.
Los estudiantes a menudo en un papel de liderazgo en cada ciudad traerán a consideración a sus colegas una recomendación para una campaña basada en qué temas están siendo planteados por los estudiantes. Los estudiantes ratificarán esa campaña e iniciarán la ejecución. Al final, reflexionar: ¿Qué aprendimos? ¿Alcanzamos nuestra meta? ¿Qué reacciones provocamos? ¿Incrementamos nuestra base de miembros? El proceso requiere fuertes relaciones entre nuestros miembros y entre nuestro personal, y requiere investigación y deliberación donde los estudiantes puedan discutir cuáles de estos temas tendrán un impacto más profundo en los estudiantes en las escuelas en este momento. Ese proceso es donde en gran parte vive el alma del trabajo de organización. Requiere determinación y relaciones reales construidas sobre una base de confianza y valores compartidos.
¿Por qué las voces de los estudiantes universitarios son tan importantes cuando se trata de abogar por la educación?
Los estudiantes universitarios saben cómo fueron preparados para tener éxito en la universidad y también cómo no fueron preparados. Así que sus reflexiones sobre su distrito son información crucial para todos los educadores que están tratando de aumentar el acceso a la universidad.
¿Es a menudo difícil conseguir que se preocupen por la educación?
Los estudiantes con los que nos conectamos, encontramos esa chispa de conexión porque ambos nos preocupamos profundamente por su ciudad y por su experiencia de pasar por el sistema de escuelas públicas K-12. Creo que hay una abundancia de estudiantes que se preocupan por este tema y no sentimos como que hay una cantidad limitada de estudiantes activistas, especialmente en 2017, especialmente después de esta última elección presidencial. El trabajo es salir para conectarse con estos estudiantes. Todos los días queremos invitar a más estudiantes para que comprendan que ellos tienen la capacidad de acción y pueden remodelar estos sistemas que les han fallado a sus familias y a sus comunidades.
¿Crees que los adultos toman la voz del estudiante en serio, o los estudiantes tienen que probarse a sí mismos en un nivel que es más alto que un adulto en estas conversaciones?
Por supuesto, las contribuciones de los estudiantes no se tienen en cuenta. Y la forma en que los estudiantes muestran su poder es trabajando juntos para exigir cambios en la dirección del distrito y trabajar con la comunidad y los votantes para que a los líderes se les exija rendición de cuentas. A medida que los estudiantes hacen estas cosas y se presenten regularmente en cada junta y se presenten en cada elección, realmente no importará lo que los líderes del distrito piensen que los estudiantes deben decir o no deben decir. Los estudiantes tendrán poder en el distrito. Para los estudiantes que sienten que han sido marginalizados o que sus voces no cuentan, no exigen respeto; hacer el trabajo de organización con un grupo de personas que comparten la misma meta y valores, y entonces quienes toman las decisiones no tendrán más remedio que consultar y poner atención a lo que se está pensando.
Para los educadores o defensores o incluso los encargados de la toma de decisiones, que quieren seguir el cambio audaz y radical que los niños necesitan, comprendiendo y buscando la experiencia que los estudiantes han tenido en sus escuelas y la comprensión de lo que son sus sueños y si sus escuelas los apoyaron o no, eso, esta es información crítica.
Traducción al Español financiada por The Eli and Edythe Broad Foundation. LA School Report mantendrá el control editorial absoluto sobre el contenido.